Los aromáticos son compuestos moleculares volátiles específicos de una fuente vegetal. En particular, los compuestos aromáticos esenciales naturales se componen de compuestos químicos naturales.
Los compuestos, potentes y concentrados, si no se administran con cuidado, pueden tener consecuencias adversas graves. Al ser considerados en medicina como un medicamento, en realidad requieren una aplicación adecuada para un uso seguro y eficaz.
Los aromáticos de origen vegetal no deben confundirse con los compuestos aromáticos. El benceno, por ejemplo, es un compuesto aromático, un hidrocarburo que se produce al quemar carbón y petróleo y se encuentra en la gasolina y otros combustibles. Las investigaciones han demostrado que el benceno es un carcinógeno (causante de cáncer). La exposición a corto plazo a altos niveles de benceno puede causar somnolencia, mareos, pérdida del conocimiento y la muerte.
Los aceites esenciales son los líquidos sutiles, aromáticos y volátiles extraídos de las flores, semillas, hojas, tallos, cortezas y raíces de hierbas, arbustos, arbustos y árboles a través de la destilación. Como producto puramente natural, los aceites esenciales son antisépticos, sin efectos secundarios y no crean hábito.
La aromaterapia es el antiguo arte de curar y calmar mediante el uso y la difusión de aceites esenciales.
La aromaterapia clínica implica aplicaciones ambientales y corporales de aceites esenciales y debe distinguirse de la aromaterapia estética. El propósito de la aromaterapia estética es el placer, no la curación; se basa en aplicaciones corporales y ambientales que utilizan difusores.
La aromacología es una nueva ciencia en desarrollo que busca comprender la base psicológica de los sentimientos inducidos por los aromáticos y documentar las formas en que los olores influyen en la memoria, la creatividad y la sensualidad. Se están realizando extensas investigaciones sobre fragancias en todo el mundo, especialmente en los EE. UU., Europa y Japón, sobre los efectos del olfato en el rendimiento laboral, el sueño y las relaciones sociales. La ciencia de la aromacología es joven, pero está experimentando un auge sin precedentes.
Bibliografía:
Linking Fragance with Human Behaviour, Alternative Therapies,
Nov 1995, Vol 1: nº5. pp.22-23.